¿Qué es la migración a HTTPS y cómo hacerla correctamente sin perder posicionamiento?

La migración a HTTPS consiste en cambiar todas las URLs de un sitio web de HTTP a HTTPS, implementando un certificado SSL/TLS para garantizar una conexión cifrada y segura entre el servidor y el navegador del usuario.

Este proceso no solo es una medida de seguridad esencial, sino también una mejora técnica que influye directamente en la confianza del usuario y el SEO.

Desde 2018, Google prioriza los sitios HTTPS en sus rankings y considera HTTP como una señal de alerta para el usuario.

¿Por qué es importante migrar a HTTPS?

• Google lo considera un factor de posicionamiento.

• Aumenta la seguridad y privacidad de los usuarios.

• Mejora la confianza del usuario al evitar alertas de “sitio no seguro”.

• Permite funcionalidades modernas como AMP, pagos online y PWAs.

• Elimina la pérdida de datos de referencia en herramientas como Google Analytics.

• Prepara el sitio para el cumplimiento de normativas como RGPD.

Riesgos comunes al migrar a HTTPS (y cómo evitarlos)

• Pérdida de posicionamiento orgánico por redirecciones mal configuradas.

• Errores de contenido mixto (cargar imágenes o scripts en HTTP dentro de páginas HTTPS).

• Indexación duplicada si Google detecta dos versiones activas (HTTP y HTTPS).

• No actualizar enlaces internos ni canónicos, generando conflictos y pérdida de autoridad.

Una migración mal ejecutada puede afectar gravemente al SEO.

Guía paso a paso para una migración HTTPS SEO-friendly

1. Adquiere e instala un certificado SSL/TLS válido.

2. Configura el servidor para forzar HTTPS en todas las páginas.

3. Aplica redirecciones 301 desde HTTP a HTTPS en todo el sitio.

4. Actualiza enlaces internos, canónicos, hreflang, sitemaps y robots.txt para apuntar a HTTPS.

5. Verifica la propiedad HTTPS en Google Search Console (no basta con solo la versión HTTP).

6. Envía un nuevo sitemap HTTPS a Search Console.

7. Corrige el contenido mixto con herramientas como Screaming Frog o Sitebulb.

8. Actualiza backlinks controlables (perfiles sociales, directorios, enlaces propios).

9. Monitorea la migración en tiempo real con Search Console, GA4 y logs del servidor.

10. Mantén ambas versiones (HTTP y HTTPS) en línea por un tiempo, pero con redirección activa.

Herramientas útiles para gestionar la migración a HTTPS

• Google Search Console – Inspección de URLs, estado de cobertura, rendimiento.

• Screaming Frog SEO Spider – Detección de contenido mixto, enlaces rotos y redirecciones.

• SSL Labs – Revisión de configuración del certificado.

• GA4 + Looker Studio – Seguimiento de tráfico antes, durante y después de la migración.

Buenas prácticas adicionales

• Haz la migración fuera de picos de tráfico o durante horarios de menor actividad.

• Realiza backups completos del sitio antes de comenzar.

• Documenta todos los cambios y revisa cada fase del proceso.

• Avisa a tu equipo técnico, de contenidos y marketing para actualizar URLs en campañas activas.

• Espera una estabilización de tráfico e impresiones entre 2 y 6 semanas.

Conclusión

La migración a HTTPS es un paso imprescindible para mejorar la seguridad, el posicionamiento y la reputación de cualquier sitio web moderno.

Si se ejecuta con cuidado y control SEO, no solo evita pérdidas de tráfico, sino que puede mejorar el rendimiento general en buscadores.

HTTPS ya no es opcional: es el estándar web. Migrar correctamente es proteger tu sitio y hacerlo competitivo a largo plazo.